martes, 11 de febrero de 2020

TOMAR PARTIDO



Demasiado a menudo se confunde espiritualidad con religiones, cultos concretos que separan al ser humano.
La espiritualidad para mi es una reflexión filosofica que nos hace tomar partido: percibo al/la que llega como herman@ o como amenaza.

En ese sentido, para mi acogida y espiritualidad van juntos: mi herman@ aunque no le conozca, llega huyendo de lo que sea, necesitando cosas basicas, etc. y yo le acojo, le abro mi casa, le digo bienvenida/o.


Entonces el encuentro y el enriquecimiento mutuo se producen.
La historia del/la inmigrante es la historia de la humanidad.
Los seres humanos nos hemos movido buscando un entorno y condiciones mejores para nosotros y nuestros seres queridos siempre.

Lo que nos hace distintos no nos da miedo, al contrario, nos enriquece.
Somos diferentes en cultura, religión, colores de nuestra piel,  visiones del mundo, etc. pero iguales en sentires y derechos.

Intercambiando, compartiendo, saberes, talentos y capacidades entre personas de distintas procedencias y experiencias e igual "fondo" humano, vital,
se produce la creatividad, lo nuevo y la posibilidad del encuentro y de crear un mundo mejor.

La hospitalidad, el respeto a la diversidad y crear CON el otro/la otra un mundo mejor es simplemente entender la naturaleza humana, entendernos a  nosotros mismos y entre tod@s y enriquecernos mutuamente.

Y es también una elección,  es tomar partido por la vida imparable que navega, vuela, se cuela en los bajos de un camión y nos empuja siempre.